Dentro de catorce días, ya habrá pasado todo. O mejor dicho, ya habrá pasado lo peor, lo más emotivo, y a estas horas estaremos celebrándolo. No me quedará maquillaje de tanto llorar, se me habrá enganchado el tacón un montón de veces y habré dado un millón de besos a todo el mundo. No se puede decir que esté nerviosa. Estando aquí, en París, los nervios solo vienen cuando te paras un poco a pensar; si no, la rutina te lleva por una vida paralela que no prepara bodas ni se viste de blanco.
Catorce... Empezamos la cuenta atrás en nuestro calendario el lunes, que quedaban 19. Después vino el 18, el 17, el 16, el 15 y hoy justo a las 18:30 h miraba el reloj.
Todo hace gracia tratándose de fechas. Nuestro calendario lo adorna una tapa de yogur desnatado, que caducaría, si no nos lo hubiéramos zampado, el día de nuestra boda.
Saldré de casa con la artillería preparada, no quiero que me pille desprevenida.Conociéndote,no me espero menos,me sorprenderías si no fuera así.Pase el que pase,seguro que será un boda muy entrañable y muy emotiva,de risas,de lágrimas,de sorpresas,de...
ResponderEliminarAquí estamos las mallorquinas ya preparaditas para dejar pronto la isla, jeje. Os deseamos que seáis muy felices y ya veréis como todo sale bien. Estamos las tres muy ilusionadas de venir a vuestra boda y seguro que será un día especial e inolvidable! Muchos besos família! Juan, Paquita, Pilar y Mª Antónia.
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